viernes, 28 de octubre de 2011

Gracias Zahi!

Estoy muy felíz por que una amiga muy especial se unió a éste blog. Me enorgullece y me llena de motivación para continuar escribiendo y expresando mis inquietudes. Ahora que mi amiga y mi fanático número 1, mi esposo, leen mis columnas voy a desparramarme más aún. Mi amiga es una mujer muy buena, luchadora, inteligente, espiritual, honesta, sincera, sensible, dulce, cariñosa, divertida y siempre fué una maestra para mí. Nos conocemos hace 23 años. Eramos una pivas cuando comenzamos nuestra linda amistad. Empezamos juntas la universidad. En aquellos entonces la conocí a ella e inmediatamente nos juntamos. Ella llenaba en mí mi necesidad de estabilidad y seriedad por la vida. Y yo creo que yo le satisfacía a ella su necesidad de diversión y un poquito de desórden. Recuerdo que yo me reía mucho y ella se reía conmigo. Eramos una chicas inocentes y  mirábamos nuestras vidas con la misma frescura y asombro con que lo hace un bebé al percatarse que llegó a éste mundo. Compartíamos las clases, las tareas, los chistes, las historias, las inquietudes, dudas y a otras amigas muy especiales que conocimos allí mismo en el mismo tiempo en que nosotras nos conocimos. Aún esas amigas ocupan un lugar muy importante y especial en mi corazón. Las añoro y extraño a menudo. Recuerdo como nos reuníamos a diario para festejarnos a nosotras mismas. Cualquier esquina era buena para la bayoya que formábamos. Todo era un chiste y una risería. Quisiera reírme así aún. Yo me reía de todo!! A veces me río, pero no creo que con la misma intensidad de aquellos tiempos. Compartíamos nuestras inquietudes académicas, familiares, sexuales, sociales y un montón de cosas más. Las horas que pasábamos en las glorietas leyendo e interpretando las historias de la revista Luz, era más la pavera infinita que nos provocaba dicha lectura que el mismísimo interés por saber algo de sexo. Vale la pena aclarar que para aquellos entonces casi todas éramos vírgenes aún. Cosa que no es muy común en ésta era. Wow!! Como cambian los tiempos, hace 23 años atrás gran parte de las chicas entraban a la universidad siendo vírgenes aún. Pues sí, la mayoría de nuestro grupo de amigas éramos vírgenes aún. Nos conservabámos bastante y nos cuidábamos de los buitres que nos asechaban. Que vida tan bonita teníamos. Esos fueron tiempos muy gloriosos para mí. El regocijo y la alegría eran las principales prioridades en mi vida. Cierro los ojos y puedo transportarme a las glorietas y vernos a toda risa, sin prisa , puedo ver la cafetería y saborear mi chocolate caliente, puedo verme sentada en el piso de la entrada de la biblioteca rodeada de éstas chicas divinas, bellas y espectaculares hablando y riéndonos sin ningún tipo de control.


Recordar es vivir. A tí mi amiga, gracias por tu bella amistad de tantos años, aunque no nos vemos mucho sabes que te adoro y que ocupas un lugarzazo en mi corazón y sueño con esa próxima reunión en la que nos juntaremos y nos reiremos más que cuando lo hacíamos hace 23 años atrás. Te quiero!

domingo, 16 de octubre de 2011

Sin Pensar y Escavando mi Sombra

Continuando la historia anterior, nuestro lado oscuro, ó nuestra sombra, contiene además de aspectos indeseables de nuestra personalidad, esos que no queremos que nadie conozca, ni perciba, contiene muchos de nuestros talentos y sueños bien enterrados también. Nuestros sueños están ahí escondidos trás la tela de araña de nuestros pensamientos morbosos y sentimientos de envidia. La envidia es el sentimiento más negativo que alguién puede sentir. Pero todos la sentimos, claro en diferentes niveles unos más que otros. Algunos en niveles bajos, otros en promedio y muchos pierden la perspectiva de la realidad en ese viaje, perdiendose en la vida de otro. Escavando en nuestra sombra podemos rescatar nuestros más preciados tesoros y el reencontrarnos con ellos podría llevarnos al camino que nos lleva a la realizacion personal soñada. Si tomamos los motivos por los cuales envidiamos a otros encontraremos cuales son nuestros miedos e inseguridades y posiblemente nuestros talentos innatos. Celebramos en otros sus logros y talentos, estilos de vida, y muchas otras cosas. Seguramente pensamos que nosotros jamás podríamos alcanzar los logros de esos a quienes admiramos tanto. Vale la pena aclarar, que somos capaces de hacer lo que queramos, lo único que nos detiene son nuestros miedos e inseguridades que andan enterrados en nuestro lado oscuro. Destápalos, Sácalos y Véncelos!! Yo ando en ese proceso. Buscándome, viéndome, aprendiendome. Muchas de las cosas que criticamos en los demás con mucha vehemencia y pasión contienen precisamente lo que necesitamos encontrar para nosotros mismos. No necesariamente el punto que criticamos del otro, pero sí penetramos bien adentro en lo que sentimos cuando hacemos esa crítica, ahí estará nuestra respuesta. Eso que sentimos; puede ser miedo de algo, inseguridad, falta de amor, falta de atención u otros sentimientos. Pero hay un sentimiento ahí enmarañado junto con la sarta de palabras y en el calor de la crítica que es el que tenemos que identificar para estudiar de dónde provienen y desenmascararlos y no dejar que se apoderen, ni opaquen nuestros talentos, ni nuestra luz y muchisímo menos nos saquen de nuestro camino a la realización de nuestros sueños. Digamos, que todo el tiempo que perdemos en pensar y criticar a otros es tiempo que nos quitamos de florecer y brillar con luz propia. Mejor, en vez de mirar a los demás y juzgarlos, criticarlos, mírate a tí, critícate a tí, encuentra que sentimiento hay detrás de esa crítica, de ese juicio contra el otro ó mejor aún a tí mismo. Es de valientes hacer un auto-exámen y descubrir los verdaderos motivos que nos llevan a sentir esas inseguridades o miedos que nos hacen desbancar nuestra ira e insatisfacciones en otros. Es nuestro rollo, es nuestro reflejo. NO me catalogo como una envidiosa empedernida, pero sí he juzgado y criticado a otros ferozmente y luego de hacerlo me siento inçomodísima y vacía. Me doy cuenta en mí misma y creéme que es así. Ese es el vacío que tenemos que estudiar y observar con lena atención. De ahí he sacado mis más ímtimos temores y por ende mis tesoros, mis más brillantes gemas ocultas.
Hace un tiempo antes de descubir ésta gran verdad decidí que no partciparía más de conversaciones dónde se esté pelando a alguién, no quiero ser partícipe,  ni complice de la hipocrecía que se sucita en grupos de amigos en que el foco principal de las conversaciones son otras personas, conocidos que no están presentes. Y sí, se puede hablar de otros, pero con respeto y consideración. Personalmente prefiero hablar de ideas, proyectos, visiones, experiencias y si voy hablar de otro, pues trato de no ofender, ni criticar la vida que llevan otras personas. Cada cual tiene derecho a vivir como le plazca, siempre y cuando no le viole los derechos al otro.
Podríamos decir que la sombra, o nuestro lado oscuro, analizándolo bien, no es tan oscuro. Si lo vemos con lupa encontraremos un baúl lleno de tesoros y una vida llena de nuevos y brillantes amaneceres. Estudíate, analízate, mírate por dentro, bien adentro y hayarás los dimantes, esmeraldas y rubíes de tu personalidad que te harán florecer. Olvídate de que aquél ó aquella tiene una casa mejor que la tuya, un estilo de vida más pomposo, vistoso, divertido y felíz que el tuyo. Que tiene mejor carro, ropa, amigos, viajes de lo que tú te puedes proveer. Si envidias eso, posiblemente tienes dentro de tí el potencial de lograrlo, pero mientrás enfoques tu atención en los logros y la vida de los demás estarás dejando tu vida y tus posibilidades de éxito dormidos en lo más profundo de un baúl. Quiero recalcar que de todas formas aunque alguién logre todas esas cosas materiales, la verdadera realización viene del alma. El verdadero foco debe ser tu alma. Una vez tu alma está satisfecha, llena y plena la vida será perfecta; con o sín mansión, carro, ropas caras, joyas y todas las demás frivolidades que mencioné antes. Si logras tenerlas con un alma felíz y llena lo podrás disfrutar de verdad; sin tapujos, remordimientos ni sentiemientos de culpa e insatisfacción.
Primero debes ver que te mueve a estar pendiente de la vida del otro, posiblemente la falta de una vida propia como realmente te gustaría tenerla, con todas las características y sueños que añoras y no lo has descubierto aún. Busca, busca y busca y conócete y dedica tiempo a verte. Sí, a verte por dentro. Encuentra tiempo para estar a solas, contigo mismo. Siéntate y no leas, ni pienses, simplemente observa lo que sientes y profundiza en tí por un buen rato. Rogocíjate de tí, disfruta lo que se siente ser tú. Aprende a amarte y a valorarte. Encuentra que te falta, que te hace triste, que te hace envidioso, que te dá miedo. Escríbelo. Esa es la clave, fortalécete, anímate a vivir tu propia vida. Busca que te gusta, que te apasiona, que te hace felíz y dirígete en esa dirección. Ese es el camino al comienzo de una vida balanceada, felíz y completa.

Hacer éste ejercicio te ayudará a conocerte. Encontrándote y descubriéndote encontrarás un mundo lleno de tí, de maravillas, de sentíres y sueños que te hará una persona más completa, felíz y con mucho que aportar.Una persona que no necesita a nadie para sentirse completa, felíz, realizada. Escavando en mí sombra me está llevando a ver, vivir y sentir el sol más intenso y brillante que pernocta dentro de mí. Todo lo que añoras emana de tí. Vívelo!