Llamas Gemelas

Nos conocimos y hemos estado juntos desde ese primer día. No nos hemos separado nunca. Fuimos novios desde el primer día que nos hablamos. Comenzamos a hablar y no sabíamos como terminaríamos nuestra extensa conversación. No sabia como levantarme de aquella silla e irme a mi casa. Finalmente lo hice, pero iba saltando de la alegría. La excitación, la felicidad dentro de mi eran tanta... La alegría y mi sonrisa eran constantes. Mi piel rebosaba de lozanía, belleza, suavidad. No podía dejar de sonreír. Sentía corriente dentro de mi estomago todo el tiempo. Eso era una señal. Estaba felíz de que al fin había dado el paso de acabar con aquella relación y dar entrada a esta nueva que me llevaba de la mano hacia el camino que hacia tiempo quería explorar, un amor aventurero, divertido, con un hombre de claras convicciones, seguro de si mismo, sin inseguridades, ni problemas existenciales...

Bailando de la alegría

Era obvio que Él sentía algo similar a mí. No lo hablábamos claro, pero la energía era palpable. Él me buscaba todo el tiempo y yo estaba loca por que me llamara y buscara. Me sentía tan realizada durante todos esos primeros meses. La relación fue viento en popa. Al poco tiempo estábamos convencidos de que hacia tiempo estábamos esperándonos el uno al otro. Su esencia era todo lo que yo sabía y sentía faltaba en mi vida. Dentro de nuestras conversaciones estaba el tema del esoterismo, era mi gran parte de mi búsqueda personal. Había encontrado el alguién con quien compartir y avanzar en el camino del aprendizaje del alma y el espíritu. Había hecho un listado de 20 cualidades que quería del compañero ideal. El las llenaba todas.

Nuestra primera película en el cine fue Autumm in New York con Richard Grere y Winona Ryder, no sabíamos de que se trataba, pero era obvia la similitud entre la situación de la película y nuestra fresca y nueva relación. La única diferencia es que ninguno de los 2 estaba enfermo de muerte y podíamos vivir nuestro amor a plenitud. Gran lección para nosotros. No había tiempo que perder, teníamos que llevar nuestros sentimientos como una prioridad y olvidarse de las opiniones de los demás. El me lleva 22 años, ya te puedes imaginar las habladurías, empezando por mi padre y familia. A mí no me importaba mucho lo que pudieran pensar y/o hablar, estaba tan feliz y me gustaba tanto todo lo que hacíamos que no perdería mis neuronas preocupándome, máxime cuando ya había gastado tanto tiempo en una relación que me daba mas preocupaciones que satisfacciones. Todos en mi familia pensaban que el cuadro de mi vida en aquel momento era el típico de un hombre que le lleva 22 años a una chica: se esta aprovechando de ella y luego la va a dejar. Bah!!! pamplinas! Todavía seguimos juntos, enamorados, caminando uno al lado del otro y con una hija maravillosa. Ya tenia 29, no era tan niña. ya tenia algo de capacidad, no? La verdad todo era maravilloso, el compartir, los paseos, las conversaciones, las ideas, el sexo!! El sexo era fugaz, apasionado, inolvidable. La verdad es que no hay mejor sexo que el que se hace con amor. Ves estrellitas, el cielo, fuegos artificiales, te cambia la perspectiva. Ahora sí sentía maripositas.... 24 horas.

Yo trabajaba en una tienda que vendía ropa, artesanías, prendas de la India, Indonesia, Thailandia... como gerente, me gustaba mucho, llevaba unos años en ese trabajo, ya necesitaba un nuevo reto. El tenía un restaurante cerca de mi trabajo y no tenía administrador, ni gerente. Necesitaba ayuda y Él me llevo para ayudarlo a administrar su negocio. Actualmente es mi trabajo. En algún momento tendré que hacer una muy merecida mención de la historia y vivencias de ese trabajo en aquella tienda ya que marco mi vida también. La experiencia, los amigos que hice y lo que vivía en aquellos entonces fueron experiencias profundas que puedo compartir y muy bien podrían ser de beneficio en la vida de algún lector(a). En el momento que salí de la tienda, era ya el momento, necesitaba un nuevo reto profesional, una nueva mira. Cambie de marido, de trabajo, de ambiente y de perspectiva. Tenia una nueva vida llena de incertidumbre, pero estaba haciendo lo que quería y lo que me hacia sumamente felíz. Me sentía libre, sólida, en absoluto dominio de mis deseos, pasos a dar y estaba muy clara de que andaba por el camino correcto. Andaba por el camino que ya tanto añoraba recorrer.Eramos Yo y mi nueva vida...

Llamas gemelas

Nuestra relación fué y es muy bonita, sólida, somos los mejores amigos, nos queremos, nos respetamos, nos ayudamos, nos consideramos, nos amamos. Gracias a Dios que me dí la oportunidad de salir de aquella tela de araña sentimental que no tenía un camino prometedor. Gracias a Dios que tuve la valentía de hacer valer mis sentimientos, mis deseos, mis valores, mi pensar sin importar el que dirán, dejando a un lado los miedos y las inseguridades. Que bueno, que lo hice. Me hace felíz y me siento orgullosa de mí misma, de que no me dejé caer, que sigo adelante en mi proceso de vida, aprendiendo, viviendo, dando.. Mi nuevo amor es excepcional compañero, amigo, padre y todo lo que siempre soñe.

No todos tienen la gracia de encontrar a su llama gemela, yo si la encontré:)